Son muchos los lugares que se esconden en Europa, pues no todo se trata de las grandes capitales de este continente, sino que también existen verdaderas joyas turísticas donde se pueden pasar días fabulosos rodeados de edificaciones pintorescas e impregnados de mucha cultura y tradición.
Una de las ciudades donde se puede disfrutar de la tranquilidad que se siente en el aire, así como de un ambiente medieval y de siglos posteriores es Melk, una interesante y pequeña ciudad austriaca poblada en los alrededores de una famosa construcción benedictina.
¿Dónde está Melk? ¿Cuál es su historia y qué ver y hacer en ella? Esto y mucho más en este post.
Indice
¿Dónde está Melk en el mapa?
Melk se localiza en las riberas del gran río Danubio, en el estado llamado Baja Austria, específicamente en el valle del Wachau, al noreste del país.
Esta pequeña ciudad tiene tan sólo una superficie de casi 26 km² y un poco menos de 6 mil habitantes.
Abadía de Melk
Para muchas personas, visitar Melk no podría ser un plan muy divertido, pues por ser ésta una pequeña ciudad, no hay mucho qué hacer y ver; sin embargo, los turistas de todo el mundo consiguen a esta pequeña joya austriaca muy atractiva al hacer un crucero por el Danubio, así como para disfrutar de la famosa abadía más popular del mundo: la Stift Melk o Abadía de Melk.
La Abadía de Melk es una construcción benedictina fundada en el año 1089 cuando Leopoldo II regía Austria. Este monasterio es, quizás, el monasterio cristiano más importante y cautivador que exista.
El mismo se construyó donde antes había una fortaleza de origen romano y, posteriormente, cuando Leopoldo I gobernaba, fue un sitio estratégico de defensa ante las invasiones húngaras. No fue hasta la llegada de Leopoldo II cuando la abadía se diseñó y se organizó, y así comenzó su periodo de esplendor.
Esta edificación descansa sobre un acantilado rocoso, desde donde se ven fluir las aguas del Danubio a su paso por el valle de Wachau.
Esta abadía destaca por un estilo barroco típico de la época, cargado de ostentación, exceso de esculturas y mucho dramatismo y agitación en las obras, por lo que es común que la abadía de Melk resulte muy llamativa para locales y turistas y pareciera que tiene una historia qué contar en cada fachada, torre o cúpula.
Durante el siglo XII se fundó la escuela de la abadía y así se dio a conocer la fabulosa colección de libros que descansa en esta famosa biblioteca, pues allí hay una basta colección de manuscritos.
Más adelante, la abadía fue viviendo distintos periodos de relevancia, como por ejemplo:
- La abadía fue el centro de la Reforma de Melk, en el siglo XV.
- Desde 1625 pasó a ser miembro de la Congregación Austriaca.
- Entre los años 1702 y 1738 tuvo un periodo de reconstrucción.
- Sobrevivió a distintas confiscaciones, disoluciones y amenazas , suerte que no tuvieron muchas otras abadías.
- Tuvo otro periodo de restauración entre 1977 y 1987.
¿Cómo es la abadía de Melk?
Veamos cuáles son los espacios o salones más importantes de esta lujosa abadía:
- Orangerie, el primer espacio que se aprecia de la abadía; data del siglo XVIII.
- Puerta Torbau, una puerta de forma octogonal donde están las estatuas de San Leopoldo y San Colomán.
- Primer patio: en donde hallarás la fachada principal de esta abadía y un atrio de entrada.
- Segundo patio: en este patio está la cúpula de la iglesia y hay una fuente.
- Escalera Imperial, también llamada Kaiserstiege : son unas escaleras por donde se llega a los famosos salones decorados con los retratos de todos los emperadores de Austria; también hay un salón donde se ubica la Cruz de Melk y una colección de pinturas.
- Salón de Mármol
- Hay una terraza, por donde se llega a la biblioteca de la abadía.
- La biblioteca: en ella se guardan unos 90 mil volúmenes de importantes manuscritos del siglo IX, así como incunables y dos mapamundis.
- Iglesia: tiene una cúpula que reseña la vida de San Benito y un altar principal decorado por varias estatuas.
- Hauptplatz, una plaza rodeada donde hay una fuente con la estatua de San Nepomuceno y algunas casitas con fachadas barrocas.
- Altes Posthaus, Antigua Casa Postal: un museo dedicado a la arqueología y la pre-historia. Tiene una fachada de estilo neoclásico.
- Ayuntamiento: construido en 1575 y ubicado en el centro de la ciudad de Melk.
¿Qué hacer en Melk?
Sin duda alguna la atracción principal de la ciudad de Melk es la imponente abadía que ya hemos descrito, y hay que tomarse el tiempo para recorrerla por completo y poder apreciar cada detalle, estilo y diseño de ella; bien que lo vale, y ha de ser uno de los monasterios más impactantes y hermosos que puedas apreciar en la vida.
Pero también puedes pasearte por las calles de Melk para que observes las casas que serpentean el borde la colina donde está la abadía. Hay un parque cerca del monasterio, desde donde puedes obtener vistas hermosas de la ciudad y del Danubio.
El Museo Municipal es otro sitio de gran interés, pues allí puedes encontrar información sobre la época pre-histórica de la ciudad y de la abadía.
Y, como en todos los destinos, no pierdas la oportunidad de degustar todos los platillos típicos de la ciudad, así como sus bebidas más populares y los postres tradicionales. Es común que encuentre pequeñas bodegas o establecimientos en el centro de Melk donde seguro podrás tomar un buen vino y comer algún aperitivo o platillo local.
En Austria es común comer cerdo con patatas y setas, así como ensalada de pollo empanado, sopa de ternera, estofados y queso picante para untar; dentro de los postres, se destaca la famosa tarta sacher, una torta deliciosa de chocolate y mermelada; otras tartas comunes son Buchten (un bizcocho con mermelada de ciruelas), Topfenstrudel (tarta con crema de queso), Apfelstrudel (tarta de manzana) y Millirahmstrudel (tarta de crema de leche).
En cuanto a las bebidas, por supuesto que la cerveza es protagonista en Austria, pero también hallarás muchos tipos de vinos, bebidas calientes y bebidas aromáticas.